Bésame...

Bésame... Que tu aliento, en ese beso, me dé Vida...

Mírame... Y que tu mirada me inunde de ganas...

Acaríciame... Que tus manos eduquen mi cuerpo y se fundan en mi Piel...

Abrázame... Y que tu abrazo Me contagie de Ti...

Atraviésame... Entra en Mi con Tu fuerza pasional... Cálame con tu néctar... Mézclate en mis licores... Abrásame con tu lanza, quiero sofocarme en tu llama...

Hagamos realidad Nuestras fantasías más anheladas... Unámos nuestras Almas en un deseo divino...

La última noche


Fue, la última noche que pasé contigo, cuando me di cuenta de que Tú me recordabas a mí misma..., como si fuera un extraño juego Hide espejos en el que se entremezclan realidad, recuerdos, deseos, evocación...
Fue en mi casa. No sé que excusas utilizaste para lograr escaparte hasta el día siguiente... Cuando se daban esas ocasiones, yo no perdía el tiempo preguntando de qué modo había conseguido el privilegio de dormir fuera sin despertar sospechas...
Follamos varias veces, una tras otra... Tú poseído por una especie de fiebre que te llevaba a hundirte lentamente y sin remedio en mi... Yo que te sorbía, te chupaba, te besaba y te succionaba hacia mi fondo...
Tú me chupeteabas, también, como a un caramelo agridulce del que no querías desprenderte..., lamiendo en Mi tus propias heridas...
Dejé abiertas las puertas del armario, porque el espejo del interior reflejaba lo que sucedía en la cama... Y jugaba a mirarme de vez en cuando, a contemplarme sobre él o debajo de él...
Aquel reflejo de los dos cuerpos entrelazados, unidos, como si fuéramos un extraño animal, me excitaba cada vez más... El duplicado de nuestros cuerpos era brillante, claro, transparente...
Habíamos encendido unas cuantas velas y la imagen de la luna parecía un cuadro recubierto por una capa de tiempo... Y, a su abrigo, caímos en un sueño de pasión...

Mátame de placer...

Mátame de placer...
Haz desbordar mi río...
Que tiemblen mis montañas...
Que erupcionen mis sentidos...
Que tu lava me queme...
Quiero ser tuya...y Resucitar en el intento...

A un vuelo de distancia...

Tal vez, sólo tal vez, si no perdiéramos el rumbo jamás nos enamoraríamos... Pero, pasa, nos desviamos, quizás con toda la intención..., es nuestra manera de sabernos vivos, con ganas de SENTIR y ser Sentidos... Para cuando eso pasa siempre es bueno saber que la gente que quieres y que te quiere, está, como muy lejos, a un vuelo de distancia... Besos y abrazos!!!

Te deseo... Te extraño

Llegué a Tu vida y, fui como el tornado que necesitabas...,una revolución para tus sentidos... Me transforme en la brisa fresca de todos tus amaneceres...
Y, ahora qué culpa tengo yo de SENTIR???...
Contigo, a tu vera...Mi fiera de los sentimientos se ha despertado..., vive sumergida en el Mar de lo desconocido, lo inesperado...
Sabiéndome deseada por Ti... Que soy la dueña de tus sueños, tus fantasías..., también de tu realidad..., necesito tu mirada, el calor de tus caricias y la llama de tu lanza...
Te deseo...
Te extraño...

No SOY sin Ti...

Hoy, la brisa me ha traído tu olor... Han venido a mi recuerdos ya olvidados...No, sólo dormidos... Y he sentido que mi Alma se hacía pequeña, se encogía hasta ser una mínima expresión de Mi..., está chiquitita sin tu abrazo...

Tu Alma se alejó, hace tiempo quizás, pero es hoy cuando lo siento así... 
Me hace falta tenerte cerca, notarte... Te necesito!!!... Si, la niña, la mujer que soy, no ES sin ti...

Sabes... Un pedacito de Ti se quedó aquí, Conmigo, me acompaña... Tú también tienes un trocito de Mi...

Ahora si lo siento, TE siento... y sonrio, sonríen mis labios..., mi mirada sigue ausente, perdida, triste...

Huéspedes incómodos...

El aire impregnado de nada y las sábanas, lisas, blancas, oliendo a frío, a ausencia... añorando el perfume a sudor, a tinte rojo,... porque contigo descubrí que no hay prevenciones ni respeto por los días no apropiados cuando el amor no tiene contención, ni la tiene el deseo.... Sin tu abrazo, sin tu impudor, mis labios están helados, deambulando,... muriendo porque no mueren los recuerdos, que se quedan como huéspedes incómodos, alimentando una añoranza impertinente capaz de ahogar cualquier idea, menos las palabras que te piensan y besan la sombra de tu imagen...

Me encanta...


Me encantas Tú... Adoro tu manera de mirarme intentando ver que guardo dentro de mi Alma... Cuando mis ojos se cruzan con los tuyos, me baño en ellos...

Me encanta tu voz... Hablar contigo, escucharte, incluso leerte... Con nuestras conversaciones me voy llenando de Ti...

Venero la manera en que tus dedos me tocan... Adoro cuando tus labios acarician mi piel y mi cuerpo se estremece a tu lado...

Me encanta follar contigo... Sentir tu polla entrando en mi..., acoplándose a mi cobijo más recóndito, mojando mis entrañas con tu licor...

Y, ahora, desde anoche, sé que me encanta que mis dedos sean tus dedos cuando acaricio mi clitoris..., que mis manos sean tus manos cuando rozo mis pechos... Adoro que fueras Tú quién ocupara mi pensamiento mientras mi placer se derramaba en una cama vacía...

Sé que tú también te morías de ganas de SENTIRme...
No hables... Mírame... También yo podría confesar que eres el artesano de mis sueños... Que en mis madrugadas, antes que los primeros rayos de Sol acaricien mi piel, son Tus manos las que me recorren... Antes que mis ojos vean la luz del día, es tu mirada la que me atraviesa... Podría también contarte que al alba, es tu aliento, mi respiración... Que arrancas gemidos a mi Alma... Que tu lanza me penetra, que entras en Mi con tu fuerza, con el ímpetu de dos amantes deseosos el uno del otro, nos poseemos... Que derramas tu llama y nuestros cuerpos se funden en uno sólo... Podría gritar que eres mi alimento, que tu savia me devuelve a la Vida, cada madrugada...

Deja...

Contigo caminando...
Y, entregada en Ti, mi Alma descansa...
... Si no estoy contigo, dime, por qué te Vivo
por qué te Sueño, por qué te Siento...
A cada momento te busco,
en todo instante Te Siento...
Deja que te cuente el cuento de los sentimientos...
Deja que practique en tu cuerpo el lenguaje de las manos...
Vamos a comprobar si nuestros cuerpos propagan el calor...
Átame de pies y manos, y golpearé tu mejilla con besos...